¿Quién soy?
Fui la segunda hija y desde antes de mi nacimiento traje a mis padres de los nervios pues mi nacimiento se adelantó y hubo complicaciones, según el diagnóstico de la ginecóloga solo tenía 7 meses y había el riesgo de no sobrevivir, mis padres hicieron todo lo posible y no sabemos cómo, pero al final nací saludable. Mis padres Enrique y Vicenta son químico industrial, y son quienes me han demostrado que con esfuerzo puedo cumplir mis metas. Tengo 2 hermanos; Enrique el mayor y Héctor el menor, además de mi abuela y mi tía paternas quienes son mi familia más cercana porque mis demás familiares viven muy lejos.
Cuando cumplí 3 meses entré a la guardería Winnie Poo a la que asistía mi hermano, debido a que mis padres trabajaban. El estar desde tan temprana edad ahí me hizo segura, independiente y audaz, ya que conforme íbamos creciendo nos inculcaban el cuidar de los más pequeños, para nosotros era algo sumamente importante el que nos considerara para esta tarea y con ayuda de las cuidadoras jugábamos con ellos y tratábamos de darles de comer. Con el embarazo sorpresa de mi hermano Héctor, mi mamá después de platicarlo con mi papá decidió dejar de trabajar para estar al pendiente de nosotros. La llegada de mi hermano nos llenó de alegría y es quien ha sido de los más cercanos a mi. El kínder fue una época en la que me volví aún más independiente pues mi mamá cuidaba un bebé y ayudaba a mi hermano mayor con sus tareas, así que yo tenía que apañármelas sola, pero esto no me molestó pues sabía que mis hermanos la necesitaban más.
Durante 6 años de mi vida vivimos en casa de mi abuela porque no teníamos una propia, pero mis padres después de varios años construyeron una para nosotros por lo cual nos mudamos. Esta zona fue escogida debido a que aún había campo y es tranquila. He asistido a distintas escuelas en las que me gustaba participar en actividades como escolta y concursos, siempre amé estudiar y hacer sentir orgullosos a mis padres. La orientación sobre lo que quería estudiar la obtuve en la secundaria, esta al ser una escuela técnica teníamos una materia o como le dicen ahí "una tecnología", yo escogí administración contable porque era la que a mi parecer es más interesante. Durante estos años participé en concursos de esta misma materia, conforme iba a aprendiendo más y más me di cuenta de que eso era a lo que me quería dedicar. Posteriormente moldee la idea en la preparatoria al tomar la materia de economía, para finalmente decidirme por los negocios.
Algo muy importante para mi y que comenzó durante la secundaria es la música. Pasé a formar parte de distintos grupos hasta formar parte de la Orquesta Sinfónica Esperanza. Entré a aprender violonchelo, me encantó tanto que me esforcé por ser la mejor, logré que después de mis primeros tres meses me integraran en el recital que se tenía planeado, fue una pieza corta, pero me hizo sentir muy orgullosa. Cuando tenía 15 años sabía que quería hacer en los próximos años, pero no tenía fijo cómo hacerlo. Un punto clave en mi vida fue participar en el proyecto ANTV impartido por chicos de preparatoria para evitar la deserción escolar, en el cual por medio de actividades me ayudaron a mejorar mi autoestima, volverme más segura y a planificar mis metas. Desde ese momento me di cuenta de que yo quería ser como ellos, volverme la inspiración de alguien y ayudarlos. Así que eso es lo que hice, apliqué y superé cada una de las pruebas que solicitaban en su bachillerato para al final poder decir felizmente que ya era parte de la comunidad. Todo esto no terminó ahí, entré al proyecto, me preparé y me sentí realizada cuando por primera vez fui a realizar las actividades con otros chicos, contarles mi experiencia y mostrarles que si se puede. Hacerles ver que lo más importante es estudiar, prepararse, tener el deseo y la voluntad de ayudar. Además, que conocí más a mi comunidad y la ciudad donde vivo, pues conocimos a chicos que vivían situaciones duras para poder seguir estudiando, comprendí que soy afortunada con mi vida y eso quiero que más chicos lo tengan. Este proyecto de ayuda es muy especial para mí, por eso decidí crear mi propio proyecto Hazlo suceder e implementarlo a chicos de mi localidad, de la misma manera en que me ayudaron a mí.
En mi familia me ha dado muchas lecciones de vida; ser mejor ser humano cada día, por ese motivo nos gusta realizar actividades como recolectar cosas y regalarlas, mi tía es un orgullo para mí, ver como la saludan y respetan por su labor. Mi mamá desde pequeña nos ha contado como fui su niñez y como se las vio duro para poder estudiar, tengo que decir que tengo grandes ejemplos de los que me guío. Por último, deseo compartir el gran apoyo que mi familia siempre me ha dado, agradezco tenerlo y que me ayuden a llevar cabo lo que me propongo. Hoy me encuentro ante el reto de formar parte de la comunidad del Tec de Monterrey y me comprometo a esforzarme para lograrlo.