¿Quién soy?
Todo empieza desde mis primeros cinco años de vida, un niño que al igual que todos tenía un sueño, el llegar a ser un futbolista profesional. Recuerdo ser un niño disciplinado y feliz desde Kinder. Un día a mis 5 años mis padres me dijeron que nos iríamos a otro país, tendríamos que viajar a Costa Rica debido al trabajo de mi padre, me sentí triste porque iba a extrañar a mis amigos de clase, vecinos, equipo de fútbol escolar y al resto de mi familia que se quedaría en México. Una vez allá, en San José, fui inscrito en la escuela con prestigio llamada Country Day School, ya que todas las clases eran en inglés, gracias a eso ahora tengo práctica y dominio del idioma. Una de las características que más me sorprendió durante mis dos años de residencia fue que en la escuela tenía compañeros de diferentes países; chinos, italianos, estadounidenses, colombianos, franceses; era increíble convivir con ellos a pesar de grandes diferencias culturales. Aprendí que todos somos personas valiosas no importa de dónde vengas, tu religión, tu cultura, color de piel o nivel económico. Desde ese entonces comprendo perfectamente la igualdad y el gran daño que causa la discriminación.
A mis siete años regresamos a México por el mismo motivo del trabajo de mi padre, nuevamente regrese para continuar con mi primaria. Se me han enseñado los valores necesarios para ser una persona de bien, cada que tengo un problema mi familia me apoya y me orienta para que después por mí mismo sepa arreglarlo encontrando una solución correcta sin dañar a las demás personas, de igual forma si algún integrante de mi familia cae en un problema lo platicamos y ayudamos. Sé lo que es la competitividad puesto a que toda mi vida he practicado deportes, estoy hablando de un entorno sano. Mi mejor recuerdo se remonta a una copa de fútbol en Acapulco, solo participaban clubes con el nombre de ¿Pachuca¿, el caso es que un visor del Club Pachuca de Hidalgo me reclutó para unas pruebas para formar parte del equipo profesional sub-13. Había compañeros de Sinaloa, Veracruz, Guadalajara, del Estado y de ahí mismo en Hidalgo. Se manejaba la clasificación y selección por 3 filtros de los cuales pasé 2 sin ningún problema, desgraciadamente no pude con el último ya que pedían una cuota la economía de mi familia no está en el nivel para cubrir tal cantidad. Me sentí triste y decepcionado, dudando de mi capacidad, habilidad y calidad, pero aprendí que los errores son la mejor enseñanza. Seguí practicando para convertirme en un mejor jugador y a la vez una mejor persona pues ahora sé lo que es la paciencia y perseverancia ya que llegué a ser parte de un equipo de Fuerzas Básicas.
Recientemente realicé servicio social, asistiendo a una Casa Hogar la cuál es la responsable del cuidado de niños de 0 a 6 años que sufrieron algún tipo de violencia de gran magnitud, ya sea física, verbal, sexual, económica o un caso de abandono. Durante el apoyo en las labores como limpieza, lavandería y cocina, pude experimentar sentimientos de empatía, melancolía, emotividad, entre otros. Me di cuenta de que soy una persona afortunada por el simple hecho de tener una familia, un techo y comida en la mesa todos los días. Estoy agradecido y quiero generar un cambio que impacte a todo el país para bien mediante mis acciones e ideas según mi área de estudio, para saber que todos los niños y adultos nunca sufran ni mendiguen por una vida digna. Sé que tengo la capacidad, valores y sentimientos para lograrlo, siendo acompañado por una escuela con prestigio, historia, de excelencia y élite nacional e internacional como lo es el Tecnológico de Monterrey.