Enemigos naturales de las plagas
Ya viste que el control de plagas lo puedes hacer por medios biológicos, los cuales son más seguros, utilizando a los enemigos naturales de las plagas. Ahora conocerás a algunos de estos enemigos.
Los enemigos naturales de las plagas se han clasificado en grandes grupos que tienen características particulares:
Depredadores
Son individuos que consumen varios organismos durante su vida, y activamente buscan su alimento. Al organismo que es consumido se le llama presa, y al cazador, que generalmente es más grande, se le llama depredador.
Algunos depredadores consumen muchos tipos de presas, y se les llama polífagos; otros consumen pocos tipos de presas y se les llama oligófagos; finalmente existen algunos que sólo consumen un tipo de presa y se les llama monófagos. Las arañas, las catarinas, las crisopas y muchas avispas son ejemplos de depredadores.
Parasitoides
Este tipo de depredador se desarrolla dentro o encima de su presa, la cual casi siempre muere al ser parasitada. La larva o gusano del parasitoide es el que se mete a la presa o se pega sobre ella. Cada parasitoide consume solamente un huésped.
Patógenos
Son microorganismos u organismos que se meten en sus presas y frecuentemente matan a sus huéspedes. Las presas ya muertas liberan millones de microbios, que son dispersados por el viento y la lluvia.
Debido a su rápida reproducción y a su tamaño pequeño, los patógenos son más fáciles de reproducir masivamente que los parasitoides y pueden ser liberados contra las plagas usando equipos desarrollados para la aplicación de insecticidas químicos.
Entre los patógenos usados para el control de plagas agrícolas se encuentran las bacterias (Bacillus truringiensis), los virus, los hongos, los nemátodos y los protozoarios. La utilización de patógenos para el control de plagas se denomina control microbial.
Organismos para el control de malezas
Los insectos que se alimentan de plantas son ampliamente usados para el control biológico de malezas. Estos insectos son similares a las plagas agrícolas, pero atacan casi exclusivamente a la mala hierba que se desea controlar. Otros organismos usados para el control de malezas son los nemátodos, los hongos y otros microorganismos como los protozoarios, las bacterias y los virus.